Hace algo de un año vengo practicando Kung Fu.
Cuando decidí empezar este blog había tomado la determinación de correr todos los días, y es algo que no he podido hacer del todo (de hecho, las carreras que hago son más de "oficina" que de otra cosa). El problema es que uno se acostumbra al día a día y termina relegando las cosas que le habría gustado hacer.
Me pasa algo raro con el Kung Fu, pues aun cuando tengo mucha flojera, me da por ir al parque a correr un par de vueltas, a pelear un rato, a "romper el viento" con bloqueos y golpes. Es relajante, entretenido y me enseña algunas cosas.
El lunes que pasó no pude ir, pero hoy iré de todos modos, no solo porque tengo que practicar y mejorar mi salud, si no porque me ayuda a relajarme en estos días en que se pelea por cualquier cosa y uno necesita una perspectiva más amplia de algunas cosas.
Mañana intentaré correr, intentaré retomar mi actividad blogera.
No hay comentarios:
Publicar un comentario